Se acerca el Día de la Madre, ¿ya tienes pensado qué regalarle? Desde Hotel Regente te vamos a dar unas ideas para que puedas pasar uno de los mejores días de tu vida al lado de esa persona tan especial.
Primero de todo y lo más importante, tenéis que elegir alojamiento para hospederos en Madrid y qué mejor que el Hotel Regente. Aquí encontraréis el descanso que necesitaréiss después de un gran día de actividades. Dicho esto, empezamos con el itinerario.
En primer lugar puedes invitar a tu madre a alguna de las muchas experiencias que ofrece Madrid:
- Pintura con vino: Una gran opción si eres mayor de edad y sino también. Ahora entenderéis el por qué. Se trata de una experiencia donde pintas cuadros con pintura fluorescente mientras tienes barra libre de vino. ¿Ya entiendes por qué hemos dicho lo de antes, verdad? Es un planazo super diferente y divertido.
- Spa: Si os gustan los planes relajantes, puedes invitarle a un spa, que siempre viene bien relajarse un poco y quitarse el estrés.
- Museo de las ilusiones: Si no sabes lo que es, te lo contamos nosotros. Se trata de un espacio con varias salas donde podrás vivir diferentes experiencias basadas en ilusiones. Recuerda comprar entrada anticipada
- Corta el cable rojo: Esta sí que es una experiencia diferente. Se trata de un teatro de comedia e improvisación. Cada día hacen una función diferente basándose en propuestas del público. Eso sí, tienes que coger entradas con tiempo para no quedarte sin ellas.
Después de cualquiera de estas actividades, le puedes invitar a merendar en algún sitio rico, como los del Salvador bachiller. Al lado del Hotel Regente tenemos dos súper chulos y con una decoración preciosa. Podrás elegir entre dulce o salado y te recomendamos que reserves con antelación. Aunque en estos restaurantes también puedes comer y cenar, eso ya está en tus manos.
Como puedes ver, desde Hotel Regente te recomendamos los mejores planes para que puedas disfrutar de la capital al máximo y que quieras repetir la experiencia de venir a Madrid y alojarte con nosotros. ¿Hay algo mejor?