Sabemos que es difícil venir a Madrid y no encontrar cosas que hacer o lugares que visitar. De hecho, lo más difícil seguramente sea decidir por dónde empezar.
Por eso, en Hotel Regente hemos querido elaborar una pequeña guía recorriendo algunos de los rincones más mágicos e imprescindibles de Madrid.
Después de la majestuosa Gran Vía, existe otra parada obligatoria para todo aquel que recorra las calles de Madrid: el barrio de Malasaña.
Tal vez este barrio aún no se encuentre dentro del planning de la mayoría de los turistas que visitan la capital, sin embargo, se trata de una zona cada vez más popular entre los residentes de la ciudad.
Malasaña es a día de hoy el barrio de moda en Madrid; últimas tendencias, sabores y olores nuevos, arte urbano… todo concentrado en un área que se puede recorrer perfectamente a pie.
Se puede decir que existieron dos revoluciones importantes en este barrio: la primera, el alzamiento contra la ocupación napoleónica en 1808. Y la segunda, más de 200 años después, La Movida. Y es que Malasaña fue capital de este movimiento en los años 80, que alzándose como templo de la contracultura y de la personalidad rockera y transgresora.
El límite oriental de Malasaña, la calle Fuencarral, alberga gran cantidad de tiendas de ropa de las marcas más conocidas, siendo además uno de los centros neurálgicos de la capital. Sin embargo, si lo que buscas son firmas alternativas, ropa hecha a mano y, sobre todo, prendas vintage, permítete el lujo de perderte por las estrechas callejuelas de este pintoresco barrio.
En la Plaza del Dos de Mayo encontrarás calles llenas de bares alternativos, cafés, boutiques y restaurantes. Seguirás encontrando un ambiente impregnado en esta atmósfera en la calle Pez y hacia San Bernardo, hasta los barracones de Conde Duque (ahora un centro cultural dirigido por el Ayuntamiento) donde las plazas adyacentes se llenan de terrazas en las que disfrutar de un buen café o una buena caña.
Y cómo no, tras pasear por las emblemáticas calles de Malasaña, no dudes en venir a descansar al Hotel Regente, ya que solo te llevará unos minutos trasladarte de este maravilloso barrio a la Gran Vía, emplazamiento del hotel.