Sin duda, el Palacio de Cibeles es uno de los edificios más imponentes de Madrid. Presidiendo la plaza del mismo nombre, nos encontramos con una estructura majestuosa que atrapa todas las miradas. Pero ¿conoces su apasionante historia?
Su construcción comenzó en 1907, con la idea de ser una nueva sede de correos y telecomunicaciones. Siguiendo las directrices de los arquitectos Antonio Palacios Ramilo y Joaquín Otamendi Machimbarrena, tardó 12 largos años en edificarse. Pero la espera mereció la pena: los autores buscaban dar una impresión de solemnidad y magnificencia, por eso se instalaron unas escaleras en la misma entrada.
Su nombre siempre fue el Palacio de las Telecomunicaciones, pero tenía una figura tan imponente que la gente lo conocía por “La Catedral de las Telecomunicaciones”. Y no es de extrañar: hablamos de una estructura de 12.207 m2 de piedra, hierro y cristal engarzados genialmente. De hecho, en su momento era el edificio de correos más grande del mundo, dejando muy por debajo al segundo edificio: la sede de Chicago, con 4.000 m2.
Muy reconocible es la escultura de la mujer colocada en su fachada, en el arco de la puerta principal. Se la conoce como “La Rubia”, y su cuerpo es mitad humano mitad vegetal. ¡Muy original! Pero si sigues observando la fachada, encontrarás esculturas tan pintorescas como las de Hernán Cortes, Magallanes o incluso el escudo de Galicia (un homenaje del arquitecto Antonio Palacios a su tierra natal).
La decoración de las plantas nobles (la 4ª y la 5ª) hace referencia al pasado glorioso del Imperio Español a lo largo de la historia: por eso encontramos el escudo de los Reyes Católicos, el águila bicéfala de Carlos I de España (V de Alemania), los escudos de Burgos y del reino de Navarra, etc.
Una curiosidad del diseño original es que iba a incluir una torre, desde donde se lanzarían los cables del telégrafo hasta la misma Puerta del Sol. Pero nunca se construyó: los motivos fueron que las obras de construcción se retrasaron más de lo esperado y la posibilidad de soterrar esos cables gracias a la obra del Canal de Isabel II.
¡Seguro que no sabías que el Palacio de Cibeles tiene un hermano gemelo! Se trata del Hospital de Maudes, ¡el parecido es innegable!
Nada más entrar en el siglo XXI, pasó de llamarse Palacio de Telecomunicaciones a Palacio de Cibeles. Además, se instaló allí la sede del Ayuntamiento de Madrid. ¡Y allí sigue!
Desde 2003, su uso como centro de Correos y Telecomunicaciones cayó en desuso con el cambio de los tiempos. Sin embargo, no es un edificio accesorio y sin función. A día de hoy, alberga bibliotecas, salas de exposiciones y es la sede de CentroCentro: una iniciativa encargada de traer a la capital conciertos, sesiones de cine únicas, talleres o seminarios.
Pero si su exterior impresiona, ¡su interior no se queda atrás! Puede visitarse de forma gratuita, y allí encontrarás impresionantes bóvedas ricas en detalles. Junto a su preciosa galería de cristal, ¡te dejará con la boca abierta! Si a eso le añadimos las preciosas vistas de su mirador, puede decirse que no puedes marcharte de Madrid sin visitar este palacio. ¡No te lo pierdas!